Porque con solo moverse no basta.
El ejercicio terapéutico es una herramienta efectiva utilizada por fisioterapeutas para aliviar síntomas y mejorar la función de pacientes con diversas enfermedades crónicas. Consiste en la prescripción de un programa de actividad física que involucra al paciente en la tarea voluntaria de realizar contracciones musculares y/o movimientos corporales con el objetivo de aliviar síntomas, mejorar la función o frenar el deterioro de la salud.
La evidencia científica sobre los beneficios del ejercicio terapéutico es sólida. Por ejemplo, en el caso de la artritis, el entrenamiento aeróbico o de fortalecimiento muscular reduce el dolor y mejora la actividad en pacientes con osteoartrosis de rodilla. En el caso del dolor de cuello y espalda, el ejercicio terapéutico es más eficaz que no recibir ningún tratamiento en el dolor subagudo y crónico de espalda. En lesiones de rodilla como el síndrome femoropatelar y la rotura del ligamento cruzado anterior, la evidencia apunta a la importancia de fortalecer el cuádriceps.
El ejercicio terapéutico también puede aliviar una variedad de alteraciones cardiopulmonares, como la cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca, asma, EPOC, hipertensión y lesión medular cervical. En el caso de las cardiopatías, un programa de ejercicio aeróbico de 30-60 minutos, 3-4 veces por semana, durante al menos 12-16 semanas, reduce la mortalidad y mejora la capacidad de ejercicio. En pacientes con EPOC, se ha demostrado que los ejercicios de fuerza con las extremidades mejoran la capacidad de ejercicio y la disnea.
Todos estos beneficios surgen del principio FITTV-EPA, que es una guía útil para planificar y ejecutar un programa de ejercicio físico efectivo. Cada letra representa un aspecto importante del ejercicio físico: frecuencia, intensidad, tiempo, tipo, momento y progresión. Además, la educación, el planteamiento de objetivos y el análisis bioconductual son consideraciones clave para lograr resultados efectivos. Desde Fragma consideramos que es importante adaptar el ejercicio terapéutico a las necesidades y capacidades individuales, y siempre debe ser diseñado y supervisado por un fisioterapeuta o profesional de la salud cualificado para evitar lesiones y maximizar los beneficios.
La Fisioterapia Respiratoria es una rama de la fisioterapia que se enfoca en mejorar la función respiratoria y reducir los síntomas de enfermedades pulmonares. Esta terapia es especialmente útil para personas con afecciones respiratorias como el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), bronquitis crónica, rinitis, bronquiolitis, neumonía, apnea obstructiva del sueño, fibrosis quística, entre otras. La Fisioterapia Respiratoria utiliza técnicas manuales y mecánicas para ayudar a limpiar las vías respiratorias, mejorar la capacidad pulmonar y reducir la dificultad para respirar.
En resumen, el ejercicio terapéutico es una herramienta valiosa en el tratamiento de una amplia variedad de enfermedades y patologías. Es importante destacar que el ejercicio terapéutico debe ser personalizado, supervisado y adaptado a las necesidades de cada paciente para maximizar sus beneficios para la salud.
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